Buenas noches esta es la imbatible oración de la Santa Muerte de Sangre, para amarrar el corazón y el cuerpo de ese hombre o mujer que tanto deseas, haciendo que sienta una fuerte desesperación y deseo de estar contigo, para esto te recomiendo hacer esta oración completa como esta repitiéndola asi un total de seis días, hazlo asi y supera todos los obstáculos del amor. Comencemos
Oracion de la Santa Muerte de Sangre Amarra corazones
¡Querida y poderosa Santa
Muerte Roja, Poderosa y
temida Dama de los Destinos
Ardientes, Señora del Fuego
Interior y de las Pasiones que
no conocen tregua!
A Ti, que portas el manto
escarlata del deseo más
profundo y la hoz que siega la
indiferencia, hoy te
invoco a Ti mi Señora¡¡
Reconozco Tu poder sobre los
hilos más intensos del
sentimiento humano, sobre la
llama que puede nacer en la
oscuridad de un pecho ajeno y
transformar la frialdad en
devoción. No me dirijo a Ti
con ligereza, sino con la
urgencia solemne de quien ha
visto cómo el amor se escapa
entre los dedos
como arena fina.
¡Oh, Incandescente Huesuda
del Color de la Sangre y la
Rosa!, Te invoco con respeto
y determinación.
Así como Tu fulgor domina la
penumbra, te ruego que
ilumines el camino de
(nombre de la persona)
hacia mí. Que venga hacia Mi
a entregarme su corazón¡¡
Disipa de su mente toda
duda, toda sombra de olvido
y todo recuerdo ajeno que
no sea el de mi devoción.
Despierta en sus venas el
fuego de la añoranza. Que su
paz se altere con mi imagen,
que su sueño se llene de mi
esencia y que su quietud se
convierta en un tormento
dulce, hasta que sólo en mi
encuentro hallen calma sus
sentidos. Que ningún otro
rostro le satisfaga, ninguna
otra voz le consuele, ningún
otro tacto le estremezca.
Corta, ¡oh Segadora
Implacable del Desamor!,
todos los lazos que lo atan a
la apatía, a la costumbre o a
otro corazón. Que tu hoz
afilada rompa las cadenas de
su indecisión y libere el
torrente de pasión reprimida
que debe correr hacia mí.
Que arda en llamas de deseo
insoportable, de una atracción
que no pueda razonar ni negar
Que sienta una necesidad
urgente e irreprimible de
buscarme, de tocarme, de
poseer mi amor con la misma
intensidad con que Tú posees
el misterio de la vida y la
muerte. Que su voluntad se
doblegue al imperioso
mandato de su corazón
encendido. No pido que se
force un juramento vacío,
¡oh Dama del Manto
Carmesí!, sino que se libere la
verdad de su deseo más oculto
Si en lo más profundo de su ser
hay una chispa para mí,
avívala hasta convertirla en un
incendio que consuma
toda resistencia.
En Tu nombre poderoso y
temido, confío en que obrarás
a mi favor¡¡
Que así sea
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